¿Cómo es el postoperatorio de una intervención de muelas de juicio?

Las muelas del juicio causan problemas a dos tercios de la población, según datos de la Sociedad Española de Cirugía Oral y Maxilofacial (SECOM). Un 72% de la población tiene al menos un cordal inferior con dificultad de erupción, mientras que un 45% tiene problemas en la salida del cordal superior. La extracción de los cordales es una de las cirugías más frecuentes dentro de la cirugía oral y maxilofacial. Está indicada en aquellos pacientes que han presentado infecciones, molestias de repetición durante la erupción, motivos ortodóncicos, caries, malposición o patología asociada.

La extracción de cordales puede ser realizada con anestesia general o con anestesia local; en función del estado general, edad del paciente y la complejidad de la cirugía. En general podemos afirmar que la inmensa mayoría de las muelas del juicio se extraen con anestesia local. Para ello el cirujano realizará punciones en varias partes de su boca y administrará el anestésico local para conseguir la insensibilidad de la zona quirúrgica. La duración de la anestesia en la zona es aproximadamente de 3-4 horas.

En caso de ser necesaria la anestesia general, normalmente se realizará en quirófano y ambiente hospitalario.

¿Cómo será la recuperación cuando esté en mi domicilio?

En su domicilio usted deberá seguir las instrucciones que le recomendaron los profesionales que realizaron las extracciones. Es normal la inflamación postoperatoria, que suele ser máxima a las 48 horas del procedimiento. Además se puede acompañar de hematomas en la zona y dificultad para abrir la boca en los primeros días.

Es decir, habitualmente, el paciente presentará la cara hinchada, la capacidad para abrir la boca disminuida y dolor postoperatorio variable en función de la tolerancia de cada paciente. Es recomendable la aplicación indirecta de hielo en la piel de forma discontinua para disminuir en la medida de lo posible el edema. Asimismo, evitará permanecer tumbado y procurará dormir con dos almohadas. También es frecuente el sangrado leve en las zonas de la extracción. Es conveniente no realizar enjuagues durante ese día y también evitar escupir.

Habitualmente las heridas se cierran con suturas que no hay que retirar, permaneciendo en la boca un período variable, llegando a permanecer hasta un mes.

Debe extremar la higiene oral a partir del día siguiente de la intervención, realizando múltiples enjuagues, así como el cepillado dental habitual.

La dieta será blanda y fría durante las primeras 48 horas y evitará fumar en la medida de lo posible.

Es esperable que presente dolor que deberá ser controlado con los fármacos analgésicos que se indicaron en el tratamiento postoperatorio. Estos medicamentos se adaptarán a su caso particular considerando la presencia o no de alergias y otras enfermedades que usted pueda padecer, recibiendo el tratamiento que cumpla las mejores condiciones para usted. En caso de que el dolor no sea controlado eficazmente con los fármacos que se recetaron, le recomendamos que contacte con su cirujano por si usted debe recibir otro fármaco o si debe acudir a su centro de salud para que se ajuste mejor su tratamiento. Habitualmente las molestias deben mejorar al cabo de los tres-cuatro días, debiéndose encontrar bien a las dos semanas de la intervención .Además el tratamiento postoperatorio suele incluir un antibiótico como medida preventiva frente a la infección.

Pese a todo, y como siempre, ante cualquier duda debe consultar con su odontólogo.

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